El protagonista es el señor Virgil Oldman un experto en obras de arte y antigüedades y director de una casa de subastas. Un día recibe una misteriosa llamada a su despacho. Se trata de la voz de una joven que reclama sus servicios. Al parecer sus padres han fallecido dejándole numerosas obras y muebles y pide al señor Oldman que se encargue expresamente de la tasación de los bienes.
A regañadientes aceptará, dando pie al comienzo de una historia de amor cargada de enigmas, secretos y misterios.En su primera visita a la villa de la mujer para hacer inventario encuentra una serie de ruedas dentadas que llaman su atención. Con la ayuda de un joven llamado Robert pronto descubrirá que se trata de piezas de un autómata del siglo XVIII.
La reconstrucción de ese autómata se puede entender como alegoría del protagonista puesto que a medida que el autómata va creciendo lo hace también Virgil que es un hombre muy especial.
Virgil vive entregado por completo a su trabajo, es inmensamente rico, inmensamente culto pero está inmensamente solo. Tiene una personalidad diferente, compulsiva, le gusta guardar las distancias con las personas y nunca ha tenido una relación amorosa que no fuera más allá de las mujeres de las que colecciona retratos de todas las épocas y que atesora en una habitación.
Se apoya en Robert para que, mientras reconstruye el autómata, vaya ayudándole también a él a forjarse como hombre y descubrir el amor con la misteriosa mujer que ha contratado sus servicios, Claire.
Pese a que Robert es mucho más joven que Virgil tiene una gran experiencia con las mujeres, es un conquistador nato.
Claire igual que Virgil tiene una personalidad muy especial. Padece agorafobia y por ello mantienen una relación a través de un muro, ella es muy reacia a soportar la presencia de otras personas.
Claire es bipolar, temerosa, de apariencia muy frágil y mucho más joven que Virgil.
Lo que me ha gustado de esta historia es que detrás de cada uno de los personajes se esconde un secreto, cada personaje es más enigmático que el anterior. Otra cosa que me ha fascinado es que en sus 130 minutos de duración vas a tener ocasión de ver dos películas. Una historia principal que te atrapa y que, aunque puedes imaginarte que algo se te está ocultando, la disfrutas y la entiendes porque es una historia completa en sí misma.
La segunda historia la descubres cuando queda a penas media hora de película aunque la has estado viendo sin darte cuenta el resto del tiempo.
Describiría "La mejor oferta" como un thriller aunque no haya asesinatos ni policía, es también una historia de amor y un drama. Todo ello envuelto en un escenario sublime y aderezado con pinceladas de historia del arte. Tornattore consigue emocionarnos visualmente con esta película, como con casi todas, al cuidar minuciosamente los detalles y consigue sorprendernos igualmente con la historia.
En cuanto a los actores, voy a destacar al protagonista absoluto que es Geoffrey Rush. Lo vimos en "El discurso del rey", en la saga de "Piratas del Caribe"o en "El sastre de Panamá". Un actor de esos que pueden pasar desapercibidos pero que sin su presencia en escena la obra no sería la misma. Creo que no podría haber interpretado mejor el papel de Virgil, un hombre que protegido con su coraza ha conseguido triunfar en la vida y que cuando por fin encuentra el momento de desprenderse de ella es abatido y destrozado.
Poco o nada más podría decir de esta película. Sólo que la dedico a los que busquen una buena historia que les sorprenda, a los amantes del detalle. A los amantes del arte, porque aunque no se ahonde en él es el tema omnipresente. A los que quieran deleitar los sentidos.
GRACIAS POR LEERME
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